El cuerpo humano posee rasgos que le son inherentes, y la ansiedad es uno de ellos. Nuestro organismo la utiliza normalmente para reaccionar ante diversas situaciones de peligro o estrés. Sin embargo, un nivel de ansiedad anormal y crónico puede hacer que una persona sea incapaz de funcionar correctamente en su rutina diaria. En ese caso, la ansiedad se convierte en un cuadro clínico. Es entonces cuando el CBD entra en escena para ayudar a estas personas a combatir dicho trastorno mental.
¿Qué es la ansiedad?
La ansiedad es una sensación de miedo, temor y agitación. Puede provocar sudoración, inquietud, tensión y palpitaciones. Es una reacción normal al estrés. Por ejemplo, puedes sentirte ansioso ante un problema difícil en el trabajo, antes de un examen o al tomar una decisión importante. Aunque la ansiedad puede ayudarte a enfrentar situaciones, darte un impulso de energía o mejorar tu concentración, en personas con trastornos de ansiedad el miedo no es temporal y puede volverse abrumador.
¿La ansiedad y sus trastornos?
Los trastornos de ansiedad son condiciones en las que la ansiedad no desaparece y puede empeorar con el tiempo.
Los síntomas pueden interferir en las actividades cotidianas, como el rendimiento en el trabajo, en la escuela y en las relaciones personales.
¿Cuáles son los tipos de trastornos de ansiedad?
Existen varios tipos de trastornos de ansiedad, entre ellos:
- Trastorno de ansiedad generalizada: Las personas que lo padecen se preocupan por problemas comunes como la salud, el dinero, el trabajo o la familia. Sin embargo, sus preocupaciones son excesivas y ocurren casi todos los días durante al menos seis meses.
- Trastorno de pánico: Quienes lo sufren experimentan ataques de pánico, que son episodios repentinos y repetidos de miedo intenso sin una amenaza aparente. Estos ataques aparecen rápidamente y pueden durar varios minutos o más.
- Fobias: Las personas con fobias sienten un miedo intenso hacia algo que representa poco o ningún peligro real. Este miedo puede estar relacionado con arañas, volar, estar en lugares concurridos o situaciones sociales (conocido como ansiedad social).
El uso del CBD para tratar la ansiedad.

El CBD puede utilizarse para tratar la ansiedad en forma de aceite, lo que proporciona alivio a medio y largo plazo gracias a sus propiedades ansiolíticas, aliviando tanto el estrés como la ansiedad. También puede consumirse mediante vaporización, lo que ofrece un alivio inmediato, ideal para episodios de ansiedad específicos. El cannabidiol actúa en las zonas del cerebro asociadas con la regulación del estado de ánimo; combinado con su efecto relajante y ansiolítico, proporciona un alivio natural para calmar la ansiedad.
En Brasil, se realizó una investigación para confirmar los efectos del CBD. El estudio se llevó a cabo con pacientes que sufrían ansiedad. El resultado: los pacientes tratados coincidieron en el notable alivio que sintieron tras el tratamiento con CBD. Los expertos afirman que el CBD actúa de forma diferente a otros cannabinoides. No se limita a producir un efecto depresivo o sedante; por el contrario, reduce o atenúa la ansiedad en sí misma.
Este efecto se logra actuando como adyuvante en los impulsos de los receptores de serotonina del sistema nervioso. Así, ayuda a mejorar el estado de ánimo y funciona como ansiolítico y relajante. Además, se ha demostrado que el patrón de flujo sanguíneo cerebral es coherente con un efecto positivo del CBD. Este estudio mostró que el nivel de ansiedad se redujo significativamente tras el consumo de cannabidiol.
La dosis recomendada de CBD varía. En casos de ansiedad, se debe comenzar con dosis bajas e incrementarlas si es necesario. Es importante consultar con un médico, quien podrá ofrecer una orientación adecuada. Cabe destacar que no se han registrado efectos secundarios conocidos, ni alteraciones en las funciones motoras, ni reacciones negativas en el estado de ánimo, ni otras anomalías fisiológicas. Por supuesto, siempre se recomienda acudir a un profesional de la salud.
¿Qué papel desempeña el CBD en los trastornos de ansiedad?
Para la ansiedad generalizada
Tomar al menos dos veces al día. Se recomienda tres veces al día: por la mañana, por la tarde y por la noche. Comienza con la dosis más baja, una gota. Aumenta gradualmente hasta encontrar la dosis que mejor se adapte a ti. No es necesario tomar la misma cantidad en cada ocasión. Algunas personas consideran contraproducente tomar CBD por la mañana, por lo que pueden limitarse a una dosis mínima en ese momento e incrementarla a lo largo del día.
Para ataques de pánico
Dado el carácter impredecible de los ataques de pánico, se recomienda mantener una dosis constante de CBD para prevenirlos. Una dosis pequeña (1 a 2 gotas de aceite de CBD) se recomienda en cinco aplicaciones distribuidas durante el día: mañana, media mañana, mediodía, tarde y noche.
En caso de ataque de pánico, aplica tres gotas directamente bajo la lengua y mantén el aceite unos minutos, ya que esto ayuda a que el efecto sea más rápido.
Para la ansiedad en situaciones sociales
Se recomienda, para quienes sufren ansiedad, tomar una dosis de aceite de CBD una hora antes de exponerse a una situación social. Por ejemplo, si tu trabajo requiere que hables con clientes o que organices conferencias, estas situaciones específicas pueden manejarse fácilmente tomando el aceite de CBD una hora antes.
Para la ansiedad nocturna
Se aconseja a quienes sufren ansiedad al intentar dormir que tomen una dosis moderada de aceite de CBD antes de acostarse, preferiblemente una hora antes. De esta manera, te acuestas ya relajado y es menos probable que la ansiedad te invada al momento de dormir.